Las constelaciones familiares son una poderosa herramienta visual que aporta conciencia de aquellos hechos traumáticos que ocurrieron en la historia familiar y que generaron un desorden en el árbol genealógico. Este desorden sigue actuando a nivel inconsciente en forma de implicaciones sistémicas para los descendientes, que siguen repitiendo el patrón para hacerlo visible hasta que algún miembro del sistema lo ordene y lo resuelva.
Por amor y fidelidad ciega a nuestros ancestros que vivieron un destino fatal, a un nivel inconsciente permitimos que algún o algunos aspectos de nuestra vida se traben y que por mucha voluntad que le pongamos, no los podamos ordenar, ya que su solución depende de que se ordene la causa profunda en el origen. Esa es la manera ciega que tienen los niños de incluir a todos los miembros del árbol genealógico en el sistema familiar: repitiendo su destino y dejando de ocupar su lugar legítimo. A veces un desorden se repite durante muchas generaciones con muchos descendientes que -en algún sentido- no pueden ocupar su lugar porque desconocen cómo hacerlo.
Mediante las Constelaciones Familiares ordenamos la situación traumática original para desanudar las consecuencias fatales para los miembros y poder recuperar la propia vida en lugar de repetir el destino de algún ancestro, enmascarado en el desorden de algún aspecto de nuestra vida.
Las Constelaciones Familiares fueron desarrolladas por el alemán Bert Hellinger quien considera que cualquier aspecto de nuestra vida que no esté alineado con el orden natural (amor y prosperidad) es un reflejo de lo que pasa en nuestro Sistema Familiar. Se utilizan para dar luz consciente de los hilos invisibles que condicionan diferentes aspectos de nuestra vida en los que se pueda percibir una traba (los vínculos familiares, la pareja, el trabajo, la relación con el dinero, síntomas y enfermedades…) y lo que se ha de contemplar para armonizarlos.
Armonizamos los vínculos personales y el reflejo que esto tiene en otros aspectos de nuestra Vida (salud, amor, trabajo...).
De esta forma, cuando en un sistema familiar todos los miembros están incluídos y ocupan su lugar, se percibe un orden natural , profundo y esencial. Todos los miembros se sienten cómodos, tranquilos, felices.
En este sentido, en el trabajo con Constelaciones inicialmente observamos cuál es la dinámica actual a la que está sometido el sistema que hace que el orden natural no esté establecido entre los miembros. Posteriormente observamos los movimientos que pide el sistema para reestablecer el orden y hasta donde podemos llegar en esta sesión. De esta forma y paulatinamente, se recupera el orden natural, en el cual cada miembro del sistema encuentra el lugar que le corresponde, y el amor profundo puede volver a fluir.
“En las Constelaciones Familiares nos dedicamos por completo a la comprensión y respeto al orden y al lenguaje existencial, que significa tener un corazón abierto y una mente que no juzga. Constelar representa una postura y un proceso profundamente meditativo”
¿QUÉ SE PUEDE CONSTELAR?
En este taller puedes constelar cualquier aspecto de tu vida:
En este taller puedes constelar cualquier aspecto de tu vida:
- Las relaciones familiares (padres, hijos, hermanos…)
- Las relaciones de pareja.
- Las enfermedades y síntomas (enfermedades concretas, órganos del cuerpo, miedos y otros estados emocionales, adicciones, trastornos alimenticios, situaciones de abuso y malos tratos, dinámica víctima y verdugo…).
- Las actividades empresariales (Liderazgo, relaciones con los compañeros de trabajo, la relación con el dinero, el éxito y la abundancia, etc)
- Cualquier aspecto que el individuo desee revisar (herencias, sexualidad, trabajo, feminidad, masculinidad, relaciones de amistad…)
LA BASE CIENTÍFICA DE LAS CONSTELACIONES FAMILARES:
Las Constelaciones Familiares tienen una base científica que explica los fenómenos que suceden dentro del trabajo terapéutico, es decir, cómo es posible que una persona desconocida pueda experimentar los sentimientos y sensaciones de algún miembro de otro sistema ajeno al suyo, ayudando como representante, dando origen a las imágenes que representan gráficamente lo que está ocurriendo en el sistema.
El Dr. Rupert Sheldrake introdujo en su libro "Presencia del pasado: resonancia mórfica y hábitos de la naturaleza" (1990) la TEORÍA DE LOS CAMPOS MÓRFICOS. Estos campos, según el investigador, permiten la transmisión de información entre organismos de la misma especie sin mediar efectos espaciales. Es como si dentro de cada especie del universo, sea ésta una partícula o una galaxia, o un ser humano, existiese un vínculo que actuara instantáneamente en un nivel subcuántico, fuera del espacio y el tiempo.
La Teoría de los campos morfogenéticos afirma que todas las veces que un miembro de una especie aprende un comportamiento nuevo, cambia el campo morfológico o productor para la especie. Este cambio es, al principio, apenas perceptible, pero si el comportamiento se repite durante cierto lapso de tiempo, su resonancia mórfica afecta a la especie entera. La matriz invisible es un campo morfogenético, capaz de producir un efecto remoto tanto en el espacio como en el tiempo.
Nuestra conciencia, según Sheldrake, puede percibir al instante y, al instante, influir sobre cualquier parte del universo. Puede abandonar el cuerpo y vagar más deprisa que un fotón a través de ámbitos infinitos sobre cualquier parte del universo. En este sentido, en el trabajo con Constelaciones Familiares, los campos morfogenéticos se manifiestan a través de las sensaciones o manifestaciones fenomenológicas de los representantes.
Belem Medina Pacheco - Facultad de Psicología - UMSN
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MARÍA PRATS
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